TITULO: PATRIOTISMO CRISTIANO

Subtítulo: ¿Es Bíblicamente Justificable Que Un Cristiano Se Levante En Armas contra el gobierno de Su Propio País?

Quiero dejar bien claro, antes de comenzar, que soy un veterano militar y prestaría servicio otra vez si mi país me necesitara para defenderlo de un enemigo que esté tratando de destruirnos y quitar nuestras libertades. Por tanto, no me acuse de pacifismo por lo que estoy a punto de decir. Matar a alguien en defensa militar de la nación de uno no es, por lo que sé y entiendo, ni jamás ha sido considerado como asesinato por ningún tribunal del mundo. Y el mandamiento de Dios, “No matarás” (Ex.20:13) es en realidad una prohibición contra el asesinato, de modo que no es una excusa legítima para aquellos que rechazan la convocación para la guerra, alegando cuestiones de conciencia. No tengo ninguna objeción con aquellas personas que sienten que deben rechazar el servicio militar por esa razón, pero solo quiero establecer el punto de que no estoy entre ellos.

Patriotismo – el amor al país – es una característica humana aparentemente inculcada dentro de nosotros por Dios. Cuando él confundió las lenguas y esparció a los hombres sobre la faz de la tierra en la Torre de Babel (Gen.11), parece que El puso dentro del corazón humano el deseo de estar dentro de límites étnicos, lingüísticos y nacionales. De otra manera, los hombres hubieran continuado congregándose como lo estaban haciendo en las llanuras de Sinar en Babilonia. Y encuentro el siguiente comentario que Dios hace en Génesis 11:6 muy interesante:

“Y dijo Jehová: He aquí el pueblo es uno, y todos éstos tienen un solo lenguaje; y han comenzado la obra, y nada les hará desistir ahora de lo que han pensado hacer.”

Adán fue hecho a la imagen de Dios (Gen.1:27) y Eva fue hecha a la de Adán (Gen.2:22). Creados aparentemente perfectos en todos los aspectos, ellos poseían obviamente un gran intelecto como es evidenciado por el hecho de que Adán tuvo la capacidad de ponerle nombre a los animales de la tierra (Gen.2:19). Creo que en este tiempo, ellos estaban en cuerpos glorificados y vestidos de luz – al igual que Jesucristo lo está hoy. Pero cuando el pecado entró en la ecuación, se “fue la luz” y ambos descubrieron que estaban desnudos. Como resultado de haber caído de la gracia, su misma naturaleza se convirtió en depravada y su habilidad de razonamiento fue grandemente disminuida. Pero al “juntar sus recursos intelectuales” construyendo la Torre de Babel, los hombres demostraron – y Dios confirmó – ¡qué nada que ellos pudiesen imaginar sería imposible! Entonces para prevenir un “corto circuito” prematuro de Su plan de proveer un Salvador para la humanidad, Dios desbarató su complot y por lo tanto frustró otro intento de Satanás (aunque el no es nombrado específicamente, sentimos su presencia en las acciones de ellos) de evitar que el Mesías viniese. Ahora en estos “últimos días” encontramos la situación algo al revés. El Mesías ya vino, pero viene otra vez a buscar a Su Esposa, la Iglesia. Así que otra vez Satanás está trabajando fervientemente, juntando grandes masas de hombres para implementar su propio plan y esta vez el los ha provisto con los medios para realmente amasar su poder cerebral colectivo por vía de las computadoras. Y Dios no está permitiendo que florezca por completo. EL CONOCIMIENTO ha sido parte del plan del Diablo para la humanidad desde el primer día (Génesis 2:9 y 17) y el gnosticismo – la búsqueda de un grado de conocimiento escondido de las masas – siempre ha sido la religión de aquellos que siguen su plan y programa. El Rosacrucianismo y la Francmasonería son solo dos facetas de esta misma religión, la cual finalmente me trae al punto de este artículo.

¿Son realmente verdaderas las historias sobre George Washington y el árbol de cereza, sobre el no decir mentiras, y el echar una moneda de dólar a lo largo del Río Potomac? No, los historiadores han determinado que estas fabricaciones (una Buena palabra para mentiras) fueron fomentadas por hombres que aparentemente querían elevar el legado de Washington a esa de un semi-dios. El revisionismo histórico ha estado presente tanto tiempo como el hombre mismo y todos nosotros sin duda estaríamos asombrados si supiéramos cuantas mentiras como esas le han sido enseñadas a los niños en las escuelas. La realidad del asunto es que George Washington fue, sin duda alguna, un Francmasón en aquel tiempo – como lo fueron la mayoría de aquellos involucrados en las etapas iniciales de la rebelión contra Inglaterra y el Rey Jorge. Y algunos autores insisten en que Washington realmente no llegó a un conocimiento salvífico de Jesucristo hasta más tarde en su vida. Pero estos hechos todavía son fervientemente protestados por “expertos” y debatidos una y otra vez sin llegarse a nada definitivo. Escritores de igual calibre y reputación están en lados opuestos del asunto, pero parece que el sentido común dictará que donde hay humo hay fuego. ¿Qué posible razón tendría el historiador para relatar incidentes concernientes al “Padre de nuestra patria” (y otros involucrados en la revolución) que contradicen la versión políticamente correcta?  Si no se puede encontrar otro motivo ulterior, entonces probablemente deberíamos asumir que la verdad ha sido reportada a pesar de los esfuerzos para sanear la historia. Y todos nosotros deberíamos darnos cuenta que varios autores han escrito relatos que difieren grandemente de la versión que hemos enseñado. Pero una realidad es incuestionable: Washington estuvo rodeado de “hermanos” Francmasones en la rebelión y se le opusieron “hermanos” Francmasones en el ejército y en la fuerza naval inglesa. Y, seria innecesario decir, que hubo una tensión excesiva sobre los juramentos que ellos dijeron de ayudarse mutuamente ¡y vuelve las acusaciones de conspiración más creíbles!

Como David Bay y yo hemos señalado en artículos anteriores, los Estados Unidos de América fueron fundados sobre actos de rebeldía contra la autoridad debidamente constituida del Rey Jorge de Inglaterra. Y ningún revisionista puede cambiar la realidad de que en Romanos 13 (y en otros pasajes) ¡la Biblia dice que esto es incorrecto! ¿Fue el Rey Jorge un déspota y despiadadamente dominante en su trato hacia las colonias? ¡Sin duda alguna! ¿Pero les dio esto a sus súbditos Cristianos el derecho a rebelarse? ¡Enfáticamente no! démosle otro vistazo a Romanos 13:1-2 solo para asegurarse:

“Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas. 2De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí mismos.”

El Rey Jorge de Inglaterra estaba ocupando el trono porque Dios lo puso ahí y aquellos que resistieron su autoridad fueron culpables de resistirse a la voluntad de Dios. Pero en Su Soberanía, Dios permitió un aparente derrocamiento del control del Rey sobre las colonias – junto con el establecimiento subsiguiente de una nación totalmente única en los anales de la historia. Digo “aparente” porque existe evidencia circunstancial que sugiere fuertemente que la revolución completa fue preparada por los Francmasones de acuerdo con un plan visualizado por Francis Bacon más de cien años atrás. Bacon escribió sobre una “Nueva Atlantis” que alcanzaría proporciones utópicas y después, como el fabulado Fénix, sería destruida y se levantaría de entre sus cenizas. Jamestown, la primera colonia sobre las costas americanas en ser proclamada como tal, fue un negocio conjunto entre la corona inglesa, Bacon, y el Caballero Walter Raleigh. Y cuando la revolución había terminado, se dice que Benjamín Franklin, John Jay, y John Adams entraron en negociaciones con la corona para ponerse de acuerdo sobre un tratado en el cual se hicieron concesiones financieras. El Rey Jorge había invertido considerables sumas de dinero en las colonias y sentía que se le debía compensar justamente. El tratado que terminaba con la guerra no era incondicional, como habría de esperarse de un conflicto en el cual un lado derrotó al otro y añade credibilidad a los alegatos hechos por la siguiente fuente: De acuerdo con el libro en línea titulado: “Los Estados Unidos Todavía Son Una Colonia Inglesa” (“The United States Is Still A British Colony”) encontrado en http://www.civil-liberties.com/books/index.html, los EU están, hasta este mismo día, financieramente enlazados con la corona inglesa y los tratados/documentos son citados, lo que prueba que estamos pagándole beneficios a los sucesores del Rey Jorge a través del Sistema de Reserva Federal.

Pero el punto principal que quiero enfatizar es que la influencia de la Francmasonería en la fundación de nuestra nación. Tan benigna y benevolente como la mayoría aparentemente lo cree, la organización está en desacuerdo con el cristianismo según está definido en la Biblia. La religión del Rosacrucianismo (la organización “paterna”) y Francmasonería es del gnosticismo – la búsqueda del conocimiento. El Apóstol Pablo habló en contra del gnosticismo y el Libro de Colosenses es su “obra maestra” sobre el tema. Muchos autores dicen que Francis Bacon fue el principal rosacruciano de sus días y el que originó la Francmasonería del Rito Escocés. Y en por lo menos una oración escrita (se cree que fue escrita cuando el fue falsamente acusado y humillado ante el Parlamento) él habló muy elocuentemente de sus muchos pecados en invocó los nombres “Dios”, y “Salvador” – causando que más biógrafos hablaran efusivamente de su sobresaliente carácter cristiano. ¡Pero debo advertir que estos comentarios no hacen a un cristiano genuino! Como traté de señalar en un artículo anterior (http://www.cuttingedge.org/sp/p184.htm), invocar el término ampliamente genérico de “Dios” y de esa forma evitar el precioso Nombre de Jesucristo, verdaderamente no significa nada. El invocar al “Gran Arquitecto del Universo”, como lo hacen los Francmasones, puede sonarle bien al oído insospechoso, pero no es una terminología Cristiana. Encontramos esto verificado en la Palabra de Dios:

“Este Jesús es la piedra reprobada por vosotros los edificadores, la cual ha venido a ser cabeza del ángulo. Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.” Hechos 4:11-12

También encuentro altamente interesante que esta declaración del Apóstol Pedro está dirigida a “ustedes, los edificadores” y habla de una piedra, la “cabeza del ángulo – ¡los cuales tienen una definitiva connotación Francmasónica! [NOTA: David Bay ha escrito sobre la probable membresía de los Fariseos y Saduceos en sociedades secretas (http://www.cuttingedge.org/ce1077.html) y sabemos que la base ocultista de estas organizaciones ha estado presente desde los días de Babilonia – cuando los “edificadores” intentaron construir “una torre, cuya cúspide llegase al cielo” (Gen.11:4)]

Como han dicho varios autores, en una forma u otra, los Rosacruces y Francmasones estuvieron fuertemente involucrados en los eventos que sucedieron camino a la Revolución Americana – y la Revolución Francesa también. El concepto de libertad es un término caliente e inflamatorio, que con seguridad agita las pasiones de los hombres cuando surge. Y lo que comenzó como una serie de demostraciones contra las políticas injustas de impuestos del Rey Jorge rápidamente escaló hasta la rebelión cuando se jugó la “carta de la libertad”. Los hombres involucrados en el llamado “Boston Tea Party” – donde un cargamento completo de té en un barco fue derramado en el muelle debido a los altos impuestos que conllevaban –fue supuestamente compuesto por uno de aquellos que acababa de dejar una reunión de logia en una taberna local. La famosa línea del Francmasón Patrick Henry sobre “Dame libertad, o dame la muerte”. Desde entonces ha sido un adorno fijo en las lecciones de Historia Americana. El Francmasón Paul Revere es otro nombre que reconocemos debido a su cabalgada a media noche para advertir que venían los ingleses. Las listas de “masones famosos” disponibles en el Internet contienen otros nombres históricamente significativos, que tuvieron parte en la revolución. ¿Serian las sociedades secretas las únicas responsables por el crecimiento de la revolución? Probablemente no. Pero negar que ellos desempeñaran un papel significativo es ignorar los hechos.

Y lo que debería perturbar al pueblo de Dios – particularmente a predicadores – son las acciones de estos hombres que han sido y continúan siendo promovidas desde los púlpitos a lo largo de la nación como la misma esencia del patriotismo. Ya sea que algunos de ellos fueran realmente cristianos o no, es otra cosa. Lo que ellos hicieron es una violación a la Palabra de Dios y nunca deberíamos ser culpables de perdonarlo – aun cuando disfrutemos de libertades que provocan la envidia del mundo entero. ¡Alabado sea el Señor por los Estados Unidos de América! Pero reconoce que El derramó Su gracia sobre nosotros a pesar del pecado de la rebelión y no por merito nuestro. Los pragmatistas entre nosotros continúan insistiendo en que el fin justifica los medios, pero ellos pasan por alto un principio bíblico: ¡el pecado siempre es castigado y América tiene una cuenta vencida hace mucho tiempo!

Ahora, vamos al subtítulo del artículo: ¿Es alguna vez justificable según las escrituras que un cristiano se levante en armas contra su propio país? La retórica inflamatoria continua volando fuerte y rápido entre las “organizaciones patriotas” cuando sucede lo inevitable y desagradable sucede dentro de nuestro corrupto gobierno. “Ellos no pueden hacernos eso, porque es inconstitucional”, es la actitud de la mayoría y la realidad desafortunada continúa siendo que ¡la Constitución es lo que diga la Suprema Corte! Eso no está bien, pero es la realidad que debemos enfrentar. Los rumores sobre conflictos armados y el “retomando a América”, mientras tocamos buenos acordes en muchos de nuestros depravados corazones, deben ser totalmente rechazados por todos aquellos que invocan el Nombre de Jesucristo. La rebelión simplemente no es una opción bíblica legítima, ¡y punto! La frase citada con frecuencia al efecto que la tiranía triunfará cuando los hombres buenos no hagan nada, es verdad hasta donde puede llegar – pero para el cristiano hay un punto después del cual nunca podemos permitirnos llegar empujados en estampida por la opinión pública. Cuando hayamos gastado todos los medios legales a nuestra disposición y “peleado la buena pelea” dentro de los límites que las Escrituras y las leyes de nuestra nación nos conceden, el recurrir a derrame de sangre y a la fuerza está totalmente contra todo lo que Jesús enseñó. El nos permitió el derecho de defendernos contra individuos quienes intentan hacernos daño físico a nosotros o a nuestras familias (Lucas 22:36), pero ese derecho no se extiende a nuestra relación con el gobierno. En los primeros días de la Iglesia, el gobierno romano masacró a millones de cristianos y aún así no hay ni una palabra en el Nuevo Testamento criticándolos por haberlo hecho, ¡mucho menos defendiendo su derrocamiento! Nuestro Dios Soberano obviamente permitió que ocurriera esa persecución para que el mensaje del Evangelio fuera esparcido mientras los individuos huían por sus vidas. Sin la persecución, la Iglesia en Jerusalén – compuesta casi totalmente de creyentes judíos –muy probablemente hubiera permanecido confinada a esa área general. Y tan desagradable como el concepto es para nuestras mentes finitas, Dios ha demostrado una y otra vez que el confort personal y bienestar en la carne de Sus hijos no es siempre de suma importancia a Su plan. Por eso es que El nos dice en Su Palabra que “todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución” (2 Timoteo 3:12). El padeció, sangró, y murió -- ¿por qué habríamos de pensar que estamos exentos?

Si vivimos lo suficiente, es muy posible que un día algunos de nosotros – quizás muchos de nosotros – podríamos vernos cara a cara con los “Leones del César” y ser martirizados. Y mientras que esta probabilidad ciertamente no es placentera, debemos aferrarnos al pasaje de las Escrituras en 2 Tes. 1:4-5, donde el Apóstol Pablo les dijo a los creyentes en Tesalónica:

“Por tanto, que nosotros mismos nos gloriamos de vosotros en las iglesias de Dios, por vuestra paciencia y fe en todas vuestras persecuciones y tribulaciones que soportáis. Esto es demostración del justo juicio de Dios, para que seáis tenidos por dignos del reino de Dios, por el cual asimismo padecéis.”

¡Por favor no pase por alto la importancia de la frase subrayada arriba! Fue la voluntad de Dios que esos creyentes sufrieran y por lo tanto prueba que ellos habían sido hechos dignos de Su reino. Y como he mencionado en artículos anteriores, Efesios 3:9-10 dice claramente que Dios está usando las acciones de Su pueblo para demostrar Su misericordia y gracia ante los “principados y potestades del reino sobrenatural. Así que recuerde esta realidad cuando usted se vea tentado a tomar las cosas en sus propias manos. Si nuestro gobierno se vuelve completamente agrio contra los cristianos, como creemos que es inevitable, debemos enfrentar ese día con la Palabra de Dios en nuestros corazones y no con rifles en nuestras manos. El hacerlo de otra manera tiene sentido para nuestra naturaleza depravada, pero lo espiritual debe prevalecer si hemos de complacer a nuestro Salvador.

Si usted ha aceptado a Jesucristo como su Salvador personal, pero ha sido muy tibio en su caminar espiritual con El, usted necesita pedirle inmediatamente perdón y renovación. El lo perdonará instantáneamente, y llenará su corazón con el gozo del Espíritu Santo. Entonces, necesita iniciar un caminar diario de oración y estudio personal de la Biblia.

Si usted nunca ha aceptado a Jesucristo como Salvador, pero ha comprendido Su realidad y el Fin de los Tiempos que se acerca, y quiere aceptar Su regalo GRATIS de la Vida Eterna, usted puede hacerlo ahora, en la privacidad de su hogar. Una vez lo acepte a El como Salvador, usted habrá Nacido de Nuevo, y tendrá el Cielo tan seguro como si ya estuviera allí. Entonces, podrá descansar seguro de que el Reino del Anticristo no lo tocará espiritualmente.

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Esperamos que haya sido bendecido por este ministerio, que busca educar y advertir a las personas, de modo que puedan ver el Nuevo Orden Mundial por venir -el Reino del Anticristo-en sus  noticias diarias.

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Dios le bendiga.

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